cosas que nunca te dije.

viernes, 16 de septiembre de 2011

Me estoy muriendo,
debe pasar el tiempo, debe pasar.
Si no que pase el mundo, ¡Qué pase algo! ¡carajo!
no puede la vida quedarse quieta
un segundo, dos segundos, alto.
la vida se detiene.
que no pase si es que estoy contigo, pero el caso es que no lo estoy, el caso es que tampoco pasa tu mundo, esas paredes se quedan quietas, no se destruyen.
La mariposa murió, ella también se cansó del no aire, del aire que les falta a todos.
Detente entonces tú o por lo menos no existas ahora, regresa más tarde cuando la irreverente muerte se haya ido.
¿Qué se hace con este corazón cortado de tajo? no por ti sino por los otros a quienes no conosco,
¿Qué se hace con los escalofrios constantes? ¡dime!
¿y es que nadie entiende? ¿nadie está vivo?
¡Aférrate! ¡Te he dicho que te aferres! porque si te dejas ir todo está perdido

Hasta mañana, quédate dormido y vive.

domingo, 20 de febrero de 2011

me regaño y me reprimo, como puede ser que quiera escribir de amor, cuando no lo veo, cuando los animales mueren y yo sigo aquí gastando mi tiempo en palabras, como puedo seguir sentada vacilando en lo que se debe hacer, pensando en finales felices, cuando muchos niños no pudieron dibujar su historia, cuando madres no pudieron dar un hijo, cuando tengo miedo, mucho miedo... como puedo pensar en buscar a alguien, cuando por cada segundo que pase sentiré un final más próximo, una persona con la agresividad que ellos nos han impuesto busque un poco de dinero, arrebate vidas por necesidad, cuando un niño tiene que usar armas para seguir vivo. Cómo puedo pensar en esperanzas cuando los que tendrían que quedarse se están yendo.. de esos que debería ser inmortales, de los que deberían aprender los pequeños hombres y transformar a los que actúan por no saber... pero es que nos los arrebatan.. no debería ser así. como puedo pensar en esperanzas.. si nos quedan a cuenta gotas.. no quiero gastarlas quiero juntarlas poquito a poco. para dárselas a los que tengan pocas fuerzas, estoy cansada de que se dejen ir... te las guardaré, se las guardaré cuando se te hayan agotado las tuyas...